Xaver I (+18)

La noche a un era lo bastante joven, a pesar de todo lo que ya paso ¿quien diría que a mi llegada a la fría ciudad me tendrían tan ajetreada?. Seguido del ritual de Vaulderie y de mi peculiar entrevista con esa basura salí del lugar, y a lo lejos, mire claramente a Xaver,  Camine a gran velocidad pasando entre los vástagos del lugar, llegando hasta estar justo de tras de el, empareje el paso hasta quedar a un lado del mismo.
Xaver, Debo de habar con tigo, si es que tienes tiempo. Me dirigí a el en un tono, respetuoso pero también frío y seco como ah sido desde un comienzo, extrañamente confío mas en el que en cualquier otro sujeto que eh visto esta noche.

Seguí caminando junto con el esperando una respuesta, la cual yo sabia sería positiva, mas sin embargo no puedo estar decidiendo
sobre el, ni ningún otro, pero el tiene algo que deseo.

El Ducti platicaba con los pocos miembros restantes de su manada, ya era conocido por todos el por qué de las bajas en su equipo, sin embargo hablaban de los caídos con gran orgullo pues encontraron su final de la forma que todo Sabbat merecía, peleando por y para la Espada. Envuelto en su abrigo oscuro reía al recordar las historias de sus batallas libradas y como habían salido triunfantes de los peligros de la ciudad.

El Ducti miró a la Paladín recibiéndola con una sonrisa, con un gesto de su mano se disculpó con su manada para acercarse a la pelirroja, sin mediar palabra escuchó lo que ella decía, mirando orgulloso con aquel resplandor en sus ojos que tanto le enorgullecía miró los ojos fríos y recios de la chica, ~Será un honor~ haciendo una leve reverencia agradeció que fuese ella quien se acercara, la admiración que el Ducti sentía por la Paladín era notoria, obviamente había escuchado las hazañas de la Brujah.

Sin decir otra palabra caminó por donde Raven le guiaba.

Agradecí un una pequeña inclinación de mi cabeza el gesto que tenia hacia mi, ante el y caminando alejando nos un poco de la concurrencia me quite completamente la capucha, estaba yo con un héroe de guerra un buen comandante al único que e vi dolido en la reunión por la perdida de alguien de su manada, algo en el me recordó al pestilente de mi sire y a su renegado padre. Mas allá de eso se que es alguien fuerte y su manada también.

A pesar de todo lo que pasaba por mi mente, mi frialdad era visible, mi  cara seguía sin emitir emoción alguna.
Xaver, valoro lo que has hecho por mi esta noche, no me gusta estar con mentiras y menos con los que confío, te hablare directamente.  Seguí caminando con el. Ya lo bastante alejados me detuve mirando la penumbra lejana. Quiero el apoyo tuyo y el de tu excelsa manada, quiero saber que puedo contar con ustedes, se de lo que son capaces y me interesan bastante. Calle por unos momentos. Sin duda alguna estaría en deuda con ustedes, no solo con tigo, si no con cada miembro de tu manada. Me quede congelada en el momento esperando su respuesta.

~Mi Lady~ habló con cautela tras escuchar las palabras que decía la cainita ~Sber que usted confía en mí es un orgullo que no puedo expresar~ colocó la mano sobre su pecho mientras volvía a reverenciar ante la Paladín ~Mi manada como yo mismo estaremos a su servicio cuando lo necesite, hemos jurado lealtad a la Espada y a cada uno de sus dirigentes~ una ligera sonrisa se formó en el rostro del Ducti mientras miraba en la lejanía a su manada quienes celebraban aquella noche ~Nos ha costado formarnos de un nombre, todos y cada uno de nosotros fuimos Cabezas de Pala, todos fuimos formados como Panders y hemos demostrado que no necesitamos pertenecer a los Clanes fundadores para combatir todo hereje~ su mirada resplandeciente volvió sobre el rostro de la pelirroja mientras observaba su mirada fría e inexpresiva, ~No pretendo juzgarle, pero dudo mucho que me haya alejado de los hermanos para decirme eso ¿acaso hay algo más?~ preguntó con un poco de temor, conocido era el temperamento de la Brujah, sin embargo su temor no era a recibir un castigo, sino a perder aquella confianza que ella le había mostrado.

Escuche atentamente cada palabra de Xaver, mi mirada era inamovible y mi cuerpo parecía una simple estatua. Me complace escuchar que puedo contar con tigo y tu manada. Voltee a el mirando le, le levante el mentón esperando que a si el se levantara. Igualmente me es gratificante saber que llevan con orgullo los ritos de creación y llevan muy bien los deberes para con la espada. Me mantuve ante el, de una forma muy formal, mi cara era solamente el de una estatua mas, sin gestos, mas que en los pequeños momentos en que mi boca expresaba los movimientos.
Te eh traido hasta acá por que me interesa bastante lo que pasara con las noches blancas y la llegada de ese Casablancas, mas los Baalis, se que ustedes estarán ocupados, pero quiero toda la información de los Baalis, Casablancas no me preocupa tanto como ellos. Ambos puntos son un blanco importante pero los demonios deben estar en picas cuando antes y casablancas muerto, recuperaremos el poder de la espada en el pais cueste lo que cueste, a diplomacia cobarde que se esta llevando en la espada, no me tiene contenta. le dije sin titubeos y directamente.

Xaver miraba directamente a Andre, su rostro se volvió inexpresivo conforme la Paladín hablaba, el Ducti no pudo más que esbozar una pequeña sonrisa al escuchar las preocupaciones de la Brujah ~Creo que coinsidimos en la cobardía que los dirigentes en San Petersburgo están tomando, cada vez nos parecemos más a los maricas de la Camarilla, queriendo fingir algo que no son más, buscando convivir con el Ganado como si aún pertenecieran a ellos~ una mueca de disgustó se formó en el rostro del Pander mientras miraba al Obispo conversando con otros Sabbat.

~Perdonará mi franqueza, pero en aquel Tzimisce es en quien menos confío, algo en él no me gusta, practicamente él lleva el control de la Espada en la ciudad, la mano derecha y consejero del Arzobispo, él fue quien aceptó la tregua y ayudó a formar los túneles junto a la Camarilla~ la mirada de odio que Xaver le dedicaba era notoria, maldecía entre dientes al Cainita de cabellos rubios, por unos segundos su silencio se prolongó para volver rápidamente a la conversación, ~disculpe, lo que me decía, las Noches Blancas es una época difícil para los Cainitas, todos debemos de movernos en los túneles pues el sol nunca se oculta, a algunos les afecta más que a otros, he visto en el curso de los años a hermanos que no pueden siquiera invocar el mínimo linaje de Caín, torpes y en una especie de Letargo prolongado, sin embargo a otros parece no afectarles en lo absoluto, no sé a qué se deba exactamente~ encogió sus hombros al no poder dar una clara respuesta a las preguntas de Andre.

~En cuanto a los Baali~ sacudió ligeranete su cabeza dejando que sus cabellos se movieran con libertad, fijando su mirada en la del Paladín bajó levemente la mirada, ~Puede empezar la purificación conmigo y mi manada, le puedo asegurar que nos encontramos limpios de la corrupción demoniaca de los Baali y si alguno fallara yo mismo le daré muerte~ irguiéndose con orgullo miró a Andre esperando la orden para que la purificación comenzara cuando ella lo creyera pertinente.

Mi alegría por sus palabras no se dejaba notar en mi semblante, Mire a Xaver por unos momentos, quedando en silencio voltee la vista a su manada, parecían estar bien y ser fieles tanto como lo decía su líder. Xaver no te preocupes por tu manada, no ahora. Le dije mientras volví la mirada a la penumbra. Se que por vuestra condición tienen ventaja en las noches blancas, para mi suerte esta sera mi primera vez y no se como me sentara. Me quede en silencio por unos momentos. Debemos recuperar san petersburgo, primero sacando a los Baali y después a la camarilla, a un que creo que lo mas conveniente es que se acaben entre ellos antes de eso. Me miro. Xaver necesitamos un topo, uno que les pueda llevar información a la camarilla a cerca de los baali pero disfrazando les de una manada de ataque de la espada, allí les acabaremos en fuego cruzado. Mantuve la mirada Fría en el. Si se te ocurre una mejor estrategia de ataque la escuchare, confío en la ferocidad de tu manada, y la aprovecharemos para debilitar a la camarilla y recuperar el control, requerimos a los dragones por su orgullo querrán retomar pocesión es seguro. O bueno eso creo. Le mire fieramente. Dime lo que tu opinas, en este momento eres mi brazo izquierdo en este lugar y estoy dispuesta a escucharte. Calle, esperando su respuesta.

Xaver escuchó las palabras de Andre con atención, su rostro no mostraba mayor expresión que la admiración que sentía por aquella Brujah ~Mi Lady, cuando usted lo decida mi manada y yo nos someteremos a su juicio~ bajó brevemente la cabeza mientras hablaba, siempre demostrando respeto ante la Paladín.

Por momentos quedó pensativo mientras miraba a los demás Sabbat, dudoso miraba a Andre mientras empuñaba sus manos ~Creo que me he adelantado a sus planes~ dijo con una sonrisa dibujada en su rostro, ~Se me ha pedido discreción en este asunto pero sé que usted es alguien en que debo de confiar~ unos segundos de silencio aparecieron entre sus palabras, tal vez aun dudoso sobre si debía o no hablar, miró en la distancia a la pequeña que jugaba con los mechones de su cabello dorado, ésta con una sonrisa miró a Xaver, como si le estuviese aprobando sus acciones ~Hemos trabajado un Cainita, aunque sigue estando en las manos de la Camarilla, su voluntad nos pertenece, cada semana recibe su vinculo, ha ido subiendo poco a poco en la Camarilla haciéndose más notorio a los ojos de la prostiprincesa y el maldito Senescal~ sonrió mientras miraba a Andre, dejando ver sus planes ~Tenemos nuestro Topo, sólo esperará las órdenes para actuar como nosotros deseemos mi Lady~

Mire a aquel vástago, era perfecto ya se estaban preparando para todo lo que yo pensé me llevaría mas tiempo, confiare en que soy el apoyo que requieren y si es necesario que se busque mas lo are. Mi rostro seguía muerto, no expresaba reacción alguna, a un que mi felicidad era interior yo ya no estaba acostumbrada a dar esos gestos humanos. Es interesante y gratificante escuchar eso de ti Xaver no me equivoque al elegirte, cree me que estoy poniendo mucha confianza en ti. Calle por unos momentos, viendo aquel pander uno que se ve con mas huevos que cualquier otro que aya visto. La purificación en la secta se ara en a danza de fuego, esas intenciones mías son para con todos inclusive para con migo. Quiero saber cuando se reúnan con el topo. Hablare con nuestra señora Agnes para saber que opina de una pequeña incursión que tengo planeada. Le dije, mientras voltee a ver el resto de la multitud. Volví a Xaver. Puedo confiar en ella ¿verdad?... Por lo que me has digo no te preocupes no hablare nada. Le cuestione y afirme, Por lo que el me había dicho no confiaba en el Tzmisce y yo no confiare en ese pretencioso lasombra. Los dragones pueden ser muy pasionales, mira que hacer una tregua suena de camarilla y no sabatt.

Xaver miró con educación a la Paladín junto a él, una sonrisa en su rostro volvió a aparecer antes de mediar palabra ~Pondría mi existencia en la Obispo, a ella la he visto pelear hombro a hombro con cualquier manada, la he visto gozar con la bendición de Caín~ habló con orgullo mientras se erguía mirando directamente a la Malkavian ~Ella es ruda, ha tenido más de una discusión con Ventseslav y Salvaggi, su cargo lo consiguió mediante la monomancia, muchos le apoyamos en su momento y ahora es bastante respetada dentro de la Secta~ tocó su pecho con su mano mientras la empuñaba ~Es para mí un ejemplo, pues como nosotros los Pander fue rechazada por su apariencia y ha logrado llegar hasta donde está, algún día espero guiar al Sabbat con honor junto a ella~ sacudió ligeramente su cabeza como volviendo en sí, la admiración que sentía era apasionada como en ningún otro Cainita.

~El topo~ habló apresurado dándose cuenta que se había desviado de aquella conversación trasendental ~Como le he dicho, su voluntad me pertenece completamente, si lo deseo vendrá arrastrándose a mis pies en cuanto le necesite~ su mirada permaneció fría sin hacer contacto con Andre, simplemente miraba al vacío ~Sólamente dé la orden y él estará aquí, sirviendo como debe de ser~

Le mire fijamente mientras se expresaba, comenzaba a notar cierto patrón con el, desviaba la mirada. Seguí su mirada y pude notar que estaba mirando en dirección a nuestra señora, ¿la vera a ella? ¿a alguien cercano a ella? ¿a quien?, les seguí escuchando tratando de saber a quien miraba. Xaver confío en ti, quiero que me acompañes, esta noche solicite una audiencia con nuestra señora y hablaremos los dos con ella, se que le admiras y ella ah de sentir lo mismo que yo hacia ti, eres un gran guerrero y se que podrás subir en la secta. Le mire fija y muertamente. ¿quien mejor que ella para ayudarte a acceder a un lugar mejor?, yo te apoyaría como militante, no quiero llenarte de cosas la cabeza, pero tansolo piensa en que si tu manada es una de las mas importantes en echar a la camarilla y liberar de los baali a la ciudad serán bien recompensados. Lo se tal vez el regente mismo los bendiga. Le tomo del hombro. Yo solo vengo de paso, pero soy un sirviente a la espada. guarde silencio por unos momentos. ¿Me acompañaras? le pregunte.

~Si mi presencia es requerida allí estaré~ miró con tranquilidad a Andre sin emitir expresión alguna, sólo fijó su mirada en los ojos de ella ~Sin embargo, no me sentiría honrado si recibiera ayuda o recomendaciones de ustedes, queremos que nuestras acciones hablen, demostrar que aunque seamos abandonados por nuestros creadores podemos ser igual de importantes que los Demonios o Guardianes, demostrar que la fidelidad a la Espada no se basa en un linaje, poco a poco lo hemos logrados, de todos los que están aquí ni uno fue capaz de acabar con un solo adorador, y nosotros, un puñado de Panders destruimos a 5 de ellos, eso deseamos~ bajó levemente la mirada, tal vez un poco avergonzado o temeroso por la Paladín ~No es que menosprecie su ayuda, pero me sentiría como un Camarilla si subiera por recomendaciones~ encogió levemente sus hombros antes de volver a mirar a Andre.

Mire cruelmente Xaver, con una mirada inquisitiva o mas bien una mirada de muerte, una mirada de cazador. Palmee un poco su hombro izquierdo, y presione suave el mismo. Eso era o que realmente quería escuchar. calle un poco. Honra te a ti y a tu manada, honra a la espada y baña la con la sangre de los enemigos de la espada, se la piedra y el filo del sabatt. Le mantuve la mirada fría. Gana lo que debas de ganar por el precio de tu sangre, como te dije yo te ayudare en la medida que tu me ayudes, yo te pagare el favor que me hagas, si en ti encuentro un guerrero en mi encontraras uno. Dejemos que los políticos se líen solos y actuemos en nombre de la espada. Le solté y palmee otro poco, en señal de mantenernos atentos y en este mundo. Hablaremos con nuestra señora y veamos ¿que es lo que opina ella a cerca de mis planes o si hay otros planes por seguir. Al cazo debemos de ocuparnos de los Baalis y echar una visita al principado de la ciudad.... a todo esto ¿sabes quien ostenta la corona?. Le pregunte, pues de eso no se me ah informado, por que si Julian el viejo justicar esta en la ciudad debemos de tener la mayor información a nuestro favor. o saber a que le estamos apuntando.

El ducti reverenció frente a Andre, en modo de agradecimiento por las palabras que ésta le dedicaba con tal frialdad, para el Pander que alguien con el historial de la Brujah dijera algo parecido se convertía en un logro personal. Con su mano diestra acomodó ligeramente sus cabellos oscuros tras sus oídos mientras volvía a mirar al Paadín ~Si mi sangre ha de servir para purificar a los herejes que así sea, combatiremos con fervor hasta las últimas consecuencias a todo aquel que se oponga a la Espada, combatir a su lado o bajo su mando será un verdadero honor, tanto para los Cruzados como para mí mismo~ volvió a reverenciar incorporándose rápidamente.

Al escuchar mencionar al dirigente Camarilla, Xaver no pudo evitar esbozar una sonrisa burlesca ~La Príncipe~ una mueca de inconformidad se formó en su pálido rostro mientras pensaba sus palabras ~Una Ventrue mimada, caprichosa y sin una pizca de conocimiento político, se rumora que ha conseguido su cargo a base de favores en altos mandos~ encogió sus hombros expresando lo poco que le importaba como ella había llegado al Principado ~Su nombre es Freya Ivanova, una burla a los mismo Ventrue fingiendo ser dura con un rostro de modelo y pasiones humanas, no es ella la que en verdad me preocupa~ fijó su mirada en Andre, su rostro reflejaba seriedad y preocupación ~Es el Senescal, un maldito Toreador, degenerado, impulsivo, planificador y traicionero, no dudaría que él mismo le dé muerte a la Ventrue~ dijo con voz fria, sin expresar más quen odio hacia aquel de quien hablaba.

Xaver es impactante, un verdadero apasionado por la espada un Guerrero que hace mucho no miraba. Se que sera fiel a la espada o eso me esta haciendo creer.
Mantuve mi mirada sobre el, mirando directamente sus ojos demostrando que nada era un juego que todo se debería cumplir tal cual se marcara. Hace algún tiempo solicite la reunión con nuestra señora como ya lo mencione, vayamos con ella para saber si esta dispuesta a atendernos en este momento, no vine a perder el tiempo la ceremonia ya concluyo. Le miraba a el fijamente a los ojos, manteniendo mi mirada muerta e inquisitorial. En cuanto a lo que me mencionas de la príncipe, si tanto es una Inútil no podemos confiarnos pues si es idiota, tomara acciones idiotas que pueden afectarnos. Le indique de forma amable que me siguiera con un leve gesto de mi mano izquierda. Comencé a caminar a lo largo del lugar donde estábamos, solo rodeando a los presentes. Creo que no serán un problema pero eso lo debemos discutir aparte, sacar a los baali y derrumbar a la camarilla en la ciudad, hablemos con nuestra señora ella tendrá un mejor punto de vista y su criterio es importante. Le mire mientras avanzábamos. Pelearemos hombro con hombro, somos hermanos de la secta, contamos uno con otro. calle un poco. Vallamos con nuestra señora, espero sea el momento indicado. Le dije mientras cambie la ruta directo a ella.

~La sigo mi Lady~ extendió su mano dejando que la Paladín le guiara en el camino, en silencio se adentraron entre la multitud Sabbat que celebraba el final del Esbat, entre murmullos algunos miembros planificaban cómo debían de actuar en las próximas noches, otros simplemente se dedicaban a gozar el momento relajándose, sabiendo que la próxima noche la Yihad retomaría la ciudad.

Entre la muchedumbre los cabellos dorados de la Obispo resaltaban de entre su túnica avinada, sentada sobre un gran sillón antiguo y algo viejo miraba con atención todo lo que ocurría en aquella sala, con una eterna sonrisa enredaba sus pequeños dedos entre sus cabellos, dejando en ocasiones su mirada fija en el vacío, murmurando para ella misma cosas que ninguno de los presentes podría decifrar. Xaver caminaba tras la Paladín, como si le estuviera protegiendo de cualquier ataque traicionero, siempre a la defensiva observaba cada pequeño movimiento que los presentes realizaban; a pocos metros de llegar a donde Agnes se encontraba ésta se levantó presipitadamente sin siquiera voltear a verles, giró su cuerpo hacia las grandes puertas de la habitación y emprendió su caminata de forma tranquila, sin prisa alguna, los Cainitas a su paso se movían sin que ésta si quiera expresara el mínimo susurro para moverles. Xaver, con un ligero movimiento indicó a Andre que le siguieran, no había demasiado qué decir.

La Obispo siguió su camino hasta llegar a un pequeño cubículo, la puerta se abrió dejando entrar la tenue luz que alumbraba el pasillo, apartando las penumbras dejaba ver la decoración que Agnes había dado a su diminuta oficinas, una habitación no mayor a los 10 metros cuadrados, una pequeña cama y un candelabro sobre una vieja mesa de noche, la pintura, desgastada y oscura resaltaban las muñecas que la Malkavian había colgado por toda la habitación.

Ambos Cainitas llegaron hasta el umbral de aquella habtación, Xaver titubeó unos momentos antes de acercarse a la mohosa puerta por la que momentos antes había accedido Agnes ~Pasen por favor~ la voz infantil rompió el silencio de aquel lugar, seguido de una risa de niña. Al centro de la habitación se encontraba la Obispo, dando la espalda a la puerta sobre un tapete del que sólo quedaban retazos visibles de lo que una vez fue un costos Persa, quemado de los extremos y deshilachado por el paso del tiempo ~No tenemos mucho tiempo, la noche es corta para todo lo que se ha planeado en tan poco tiempo~ miró sobre su hombro dejando ver parte de su rostro porcenalizado rodeado por sus dorados cabellos junto a un par de blancos y relucientes colmillos.

Las palabras de nuestra señora eran mas que claras, ingrese esperando ser seguida, mire a Xaver para que este cerrara la puerta. De inmediato mi muerta mirada inexpresiva se posaba sobre nuestra señora. Mi voz se aclaro pero no era mas que la voz de un ser muerto. Ante ella me descubrí completamente el rostro. Mi señora eh hablado con Xaver, a si mismo quiero darle por enterada todo lo que eh estado pensando y mis deseos para la espada en esta nación, a si espero contar con su criterio y opinión para seguir los planes que deseo ejecutar. Le dije directamente y sin escalas Se me dieron ordenes explicitas de acabar con los Baali a un sin tener toda la información pertinente, pero a si mismo tenemos la declaración de caza a Casablancas y podemos tomar todo esto a favor. Calle y espere unos momentos. Claro creando un buen plan de batalla, pues los baali son buena estrategia distractora, que mejor que acabarlos con un fuego cruzado. Comente sin permutas, para abrir el tema.

Xaver permaneció en silencio, cerrando la puerta tras de sí ingresó a la pequeña habitación. Con total educación posó sus manos entrelazabas frente a él, simplemente limitándose a escuchar y de ser necesario opinar cuando se le indique.

La Obispo permaneció inmóvil escuchando las palabras de Andre, su mirada se fijaba en la muñeca que sostenía entre sus brazos, ~Sabes pequeña~ se giró sobre sí misma hasta quedar de frente a la Paladín, alzó levemente su mirada hasta contemplar el rostro inexpresivo de la Brujah ~Yo no soy una guerrera, mucho menos una estratega, pero, ¿tú crees que ese plan funcionaría con Casablanca? preguntó de forma fría mientras estrechaba su muñeca a su pecho, ~Tal vez no le conozcas o no te has dado a la tarea de buscar más información sobre él, pero si fue nombrado Justicar es por algo, no creo que haya llegado hasta tal nivel dejándose sorprender por fuegos cruzados ¿o usted qué cree pequeña?~ miró con incertidumbre a la pelirroja, esperando su respuesta clara.

Mantuve la mirada firme. y mi voz solo se alzo después de la de mi señora.
Para ser mas clara, no me interesa ese justicar. Lo que me preocupa son los baali y retomar el poder de la ciudad. Pero se que de una u otra forma su consejo para con migo me puede ayudar, deseo concentrarme y hacer lo mas conveniente para la espada, es obvio que los baali son un problema y que la camarilla lo es. calle por unos instantes. Por tal motivo vengo ante usted solicitando un consejo, que me indique como podríamos comenzar pues me es de alarmante importancia el estado en el que estamos. Tenemos el deber de retomar la ciudad y echar a la camarilla. Pero tenemos muchas cosas en puerta y las ordenes del Arzobispo Raffaele Salvaggi no son directas. Le dije. Por favor detesto que no sean claros, se que no lo soy en momentos, pero soy muy directa eso me llevara a la muerte, pero ¿que es peor?. Por un momento pensé en aquel idiota, ese maldito sire mio que solo se metió en algo con lo que no pudo... Imbécil.

Una pequeña risa escapó de los labios de la Obispo, alzó la mirada contemplando el inexpresivo y frío rostro de la Paladín, escuchó atenta lo que decía esperando encontrar alguna coherencia en lo que decía ~Tienes una reputación pequeña~ ladeó levemente su cabeza sin apartar la mirada de aquella mujer ~Tu Sire cometió errores terribles, que lo llevó a su destrucción, sin embargo dejó un legado, tal vez no el mejor en la historia del Sabbat pero aún así cualquiera reconocería el nombre de Laguna~ sus pequeños dedos se entrelazaron entre los decrepitos cabellos artificiales de la muñeca que sostenía, con voz fría volvió a hablar sin apartar su mirada ~No cometas los mismo errores, tu historia es lugar a parte en la Espada, el pasado de tu Sire no se cierne sobre ti, pero parece que te dejó muy bien marcado sus ideologías~ aclaro su garganta antes de proseguir ~Los baali, la Camarilla, Casablanca, los Anarquistas y el Brujo son un problema conjunto, no puedes verlos por separado pues tarde o temprano uno te aplastará, en lo único que nos parecemos a la Camarilla es en la profunda desconfianza hacia los Diablos, Casablanca es un pilar de la Camarilla sediento de poder, la Príncipe no es más que una marioneta para aquel con inteligencia para controlarla, los Anarquistas se convirtieron en unos renegados al Edicto que se promulgó para unirlos más a la Camarilla y los Tremere buscan retomar sus raices que fueron cortadas en Ceoris~ extendió su pequeña mano hasta tocar la de Andre, ambas llenas de frialdad se unieron entrelazándose ~¿cómo usarías eso en favor de la Espada? te recuerdo que yo no soy una estratega que ha luchado en campos de batalla, sólamente doy consejo a Salvaggi que aún con su peculiar y dudosa forma de proceder ha mantenido la Espada unida en San petersburgo~ soltó su mano para después dedicarle una sonrisa a la pelirroja inexpresiva.

Mire en todo momento a aquella niña que estaba ante mi, una maestra al poseer tal cargo, cada palabra de ella me estaba sirviendo, en verdad. El problema mas grande desde mi punto de vista no es matar a la perra que tiene la corona, si no ponerle correa a julian, seguramente viene por algo grande y la única forma de evitar el veneno es cortando los colmillos. Comprendo mi señora, en cuanto lo de Mi Sire eso no me tiene interesada si el gano su muerte fue por sus actos, ¿que si quiero allegar a tomar el cargo que el ostento? pues no, la sangre de aquel corre en mi pero también la de un autentico líder. Calle por unos momentos sin tener gesto alguno. Teufel... Le dije y calle de nuevo. Creo que de el también van a hablar, aun que sabemos que un autentico lider en una ciudad muy poderosa, mas bien ambos, no me llenare de gloria con los actos de ellos. Mis actos son los que marcaran mi existencia, acabare con los demonios de forma inmediata y por la espada que obstruiré los movimientos de la camarilla en contra de la espada en todo momento, acabare con aquellos que apoyen un movimiento en contra de la espada aun siendo nuestros superiores. Le dije, mientras mi cara seguía con un gesto muerto, pero mi presencia se volvía amenazadora al momento que mis palabras emergían, el momento se alteraba como la tensión que precede a la muerte de la presa. Cumpliré con mis palabras y lo que prometo aun si esto me lleva a la muerte. Aclare mientras mis colmillos se mostraban fuertemente.

Off::

El miembro 'Andre Raven' ha efectuado la acción siguiente: Tirada

'Plateado' :

Resultados :

La pequeña Obispo ladeaba su cabeza de un lado a otro mientras escuchaba hablar a Andre, ~Los nombres que vociferas no significan nada para mí, yo veo a una Brujah sedienta de libertad, que las sombras de su pasado dejen de acompañarla en cada paso que da hacia su meta, una que llegó tan lejos como le ha sido posible~ encogió sus hombros sin dar mucha más importancia a lo que decía aquella mujer ~Si vives en la sombra del pasado te quedarás en el pasado, lo que nos trae ahora es el presente y lo que ocurre en San Petersburgo, es algo muy diferente a lo que ocurrió en Alemania o en México ¿En qué planeas enfocar tus energías? Morir no es una opción, pero si mueres quiere decir que no merecías estar en donde te encuentras~ esbozó una pequeña sonrisa para después agacharse y dejar a la muñeca sentada a sus pies.

Volvió a erguirse sacudiendo su cabello ligeramente ~Pero tú estás jugando conmigo pequeña, eso no me gusta~ miró de forma seria mientras cruzaba sus brazos sin importarle lo intimidante que pudiese resultar la Paladín frente a ella ~Te he cuestionado algo vital y tú te enfocas en tu pasado y lo mucho que has sufrido y piensas sufrir, los verdaderos líderes no se ensucian pequeña, tienen gente a su mando para que se ensucien por ellas, un líder debe de encontrar la forma en que las bajas sean mínimas y los triunfos máximos ¿de qué sirve un líder muerto? ¿qué planea hacer en San Petersburgo? ¿qué necesita de mí?~ la pequeña rubia alzó su ceja derecha mientras observaba atenta a Andre, poco desviaba su mirada a la silueta rígida de Xaver quien permanecía inmóvil en aquel umbral.

Resultado de Tirada

Aunque logras controlar la furia que sientes al escuchar nombrar tu sangre la rabia continúa persistente.

Off Rol

En tu ficha nunca se especifica el catalizador de tu furia, por lo que cualquier humillación que conduzca al Frenesí será tu catalizador, así mismo, durante tu entrevista con el Arzobispo él mencionó a tu Sire y no realizaste dicha tirada, no puedes usar los defectos de sangre en ocasiones sí y en otras no.

Mantuve la mirada, mientras la cólera en mi era permanente. Me fije una menta en ese momento y remarque una sonrisa macabra al escuchar las palabras de aquella superior. Las palabras parecen ser distorsionadas de lo que en verdad quiero expresar, yo no soy ellos y no lo seré, soy mejor a un y vengo como emisaria de la espada sirvo a la espada. Esta mima noche comenzare a alistar los preparativos para una incursión contra los demonios, los matare o moriré en la batalla. le dije mientras la mire. Dejare que mis superiores se ocupen de lo que ellos decidan, la camarilla no es mi problema hasta que se crucen en mi camino. y a si sera. le exprese enteramente decidida, mientras lentamente se me borraba la sonrisa macabra de la cara, volviendo a mi estado perpetuo sin gestos ni nada, Siendo honesta me estaban centrando sus palabras, ya me estaba descarrillando y trataba de solucionar todo en el lugar, pero si hacia eso la bomba me iba a explotar en la cara. Gracias mi señora, tal vez no lo parezca pero me ayudo bastante pues ah centrado mis pensamientos. Le dije honesta y directa sin rollos, reconociendo lo que estaba pasando.

Los pequeños hombros de la Obispo se encogieron por unos momentos, sus ojos azules se fijaban en los labios de la Paladín, ~Pequeña~ habló en casi un murmuro mientras extendía sus manos hasta tomar las de Andre, una sonrisa se formó en su rostro dejando que aquel par de colmillos se asomarán bajo su labio superior, ~Yo no tengo idea de lo que hablas, yo no he dicho nada que te sirva de guía, las respuestas que buscabas estaban dentro de ti misma~ dio una ligera palmada en las manos de la Brujah, entrecerró sus ojos mientras negaba con la cabeza de forma ligera y pausada ~Sin embargo aun tienes un problema, la muerte sigue en tus pensamientos, un líder debe de guiar a sus súbditos con confianza y valor, si ven a un líder listo para morir y no para triunfar ellos correrán con la misma idea~

Alzó levemente la mirada mientras se acercaba a la pelirroja quedando a escasos centímetros de ella, un gesto se formó en su rostro mientras retrocedía un par de pasos para volver a toparse con la mirada de Andre, ~La sangre que debe de correr es la de todos los herejes, las calles deben de bañarse con el carmesí de cada traidor, no con la nuestra, busca súbditos efectivos, pero la carne de cañón también es necesaria, así fue como empezó Xaver, como un pedazo pútrido listo para ser sacrificado contra los Tremere, sin embargo ha sobrevivido y llegado al punto donde ha formado su manada y ésta ha acabado con grandes guerreros Baali, aunque a él no le guste alardear exterminar Baalis no es fácil, sin embargo sus hazañas van mucho más allá, desafortunadamente el ser un proscrito le ha costado que sus éxitos sean minimizados, si fuese de un legítimo Clan te aseguro que sería un Cardenal, solo date una idea de lo que ha logrado~ la mirada se posó en la innerte silueta del Ducti, quien no había realizado ni el más mínimo movimiento desde su entrada ~Con toda verdad te digo, yo podría poner mi existencia en manos de él sabiendo que me cuidará como ningún otro Cainita en todo San Petersburgo, si en alguien puedes confiar hazlo en él y sólo en él, nunca te defraudará~ sonrió mientras soltaba las manos de Andre, dando media vuelta tomó su muñeca del suelo, volviendo a dar la espalda a la Brujah.

Los gestos de aquella maestra eran observados a detalle y sus palabras estaban siendo procesadas con cuidado, pues a pesar de todo lo que me decía sus palabras ayudaron a centrar mas mis pensamientos. Le comprendo maestra, sabe ya eh hablado con Xaver para solicitarle su apoyo para la casería  de los baalí. Le dije firme mente, sin tener gesto alguno en mi, mas que mis palabras. Actuare de la forma que sea  requerida para exterminar a aquellos intrusos y volveremos con la victoria para con la espada. Le dije, pero al parecer sus palabras conocían mucho de mis pensamientos,  sabe mucho de mi objetivo personal y tiene absoluta razón debo cumplir a la espada, ese idiota tuvo lo que se mereció y lo mas seguro es que este muerto y no lo vuelva a ver en esta existencia y su sire menos probable a un que tal vez me este vigilando, eso no lo se. En este momento comprendo las palabras de mi superiora y las doy por ciertas pues tiene gran razón. Agradezco este tiempo que me brinda pero es momento que comience a conocer al resto dela manada para acabar con los baalí. Mientras le mire fijamente a los ojos.

La Malkavian permanecía de espaldas a Raven, solamente movía su cabeza de forma positiva mientras ella hablaba, no emitía mayor sonido que el de sus manos recorrer el cabello de aquella vieja muñeca, ~Muy bien pequeña, has tomado buenas decisiones en tu primer noche en la ciudad, sigue así y el dulce sabor de la victoria escurrirá por tus labios, pero aquí hasta el más mínimo error puede ser trágico y terminar con tu existencia y la de tus seguidores~ sobre su hombro miró a la Brujah mientras esbozaba una ligera sonrisa.

~Como último consejo puedo decirte, ataca en los puntos más débiles del Sangre Azul, busca causarle el dolor más grande que haga que su corazón se desgarre al ver tan atroz momento, hazlo que él venga a ti que camine hasta su destino final pensando que la victoria se alzará sobre su sombra extensa y marchita, hazlo vivir el mismo infierno antes de que su néctar escurra de cada parte de su cuerpo~ una pequeña risa salió del labio de la Obispo los cuales cubría delicadamente con su pequeña mano, ~cuando él sienta aquello poco le importará la Mascarada, las Noches Blancas e incluso su misma misión, así tendremos el motivo perfecto para romper la estúpida tregua que se cierne sobre nosotros estas futuras noches, la Camarilla verá a uno de sus grandes pilares desplomarse junto con su escaso poder en la ciudad, cuando eso suceda el derecho de una Partida de Guerra será tuyo y él vivirá en ti como uno solo~ lentamente bajó hasta sentarse sobre el piso sucio y polvoroso dejando que su vestido carmesí se extendiera cual fino tapete ~planifica y ataca, date el tiempo suficiente para ver a tus enemigos caer, que Caín y su poder te acompañe en las futuras campañas pequeña, aquí nos encontrarás a mi madre y a mí listas para escucharte y ayudarte en lo que nos sea posible~ sin más guardó silencio, sabía que la reunión había terminado, no había más que decir y Xaver lo sabía.

Tan pronto la Obispo calló el Pander abrió la puerta dejando que la Paladín saliera de los aposentos de Agnes.

Me incline dando una reverencia a mi superior aun estado a espaldas de ella, mientras no pude evitar tener una sonrisa creciente mente dibujada en mi muerto rostro, pero no era una sonrisa humana, a un que si llena de un odio y placer inmenso que me provocaron las palabras de mi superior. Gracias, con su permiso. Sin decir mas me levante con la misma sonrisa que lentamente se borraba de mi cara, mire a Xaver y le asenté mientras salí del lugar, espere a que el saliera con migo cerrando la puerta y me moví entre los presentes de la "fiesta" y haciendo que Xaver me siguiera, hasta llegar a estar lo bastante alejados de los oídos de los demás. Para mirar a Xaver a los ojos. Bien, mis intenciones no pueden ser mas claras y ya lo sabes, tiene razón preparémonos para ganar y vencer destruiremos a los Baalí y aremos que ese pilar de la camarilla se desplome, necesitamos saber si tiene progenie alguien que seguro le dolerá pero sin hacer a un lado la principal misión, Xaver cuento con tigo y tu manada, Hagamos que se llene de sangre y gloria la espada. Le dije mientras observe esta vez el oscuro cielo por encima de las copas de los árboles.

Off::

El Pander caminó tras la Paladín, siempre cuidando su entorno, en busca de la mínima señal de peligro, algo que le permitiera mostrarse tal cual es ante ella, pasó junto a su manada haciendo una pequeña señal para que le esperasen ahí, en el mismo lugar donde les había dejado antes de dirigirse a los aposentos de la Obispo.

Tras la Brujah salió al campo santo, la noche continuaba, con una relativa calma, las luces de la ciudad se miraban en la distancia minimizadas por la belleza que sólo el cielo ruso puede poseer, un cielo limpio y despejado, con la luna en lo más alto alumbrando las tumbas y mausoleos que caracterizaban aquel viejo cementerio. ~Mi señora~ el Ducti murmuró al escuchar la voz de Andre romper con aquel silencio  ~Confíe en nosotros, buscaremos al sucio engendro de Casablanca, su sangre correrá en los pies del Justicar, le daremos la peores de las muertes, la más larga y agónica que pudiese existir, y le dejaremos existir sólo para que Julian vea cuando su chiquillo se extinga sin poder hacer nada, él será nuestro primer golpe, seguramente también buscarán a los Baali, cualquier información que conozca será suya y la utilizaremos para alzarnos con la misma victoria que lo hicimos años atrás contra los Tremere~ bajó la cabeza en señal de respeto, sabía que necesitaba la aprobación de la Paladín para hacer cualquier movimiento, ella era ahora la líder de la manada, Xaver seguiría sus órdenes al pie de la letra, siempre que éstas llevaran a la estratégica victoria del Sabbat.

Mire a Xaver y le asenté, sus palabras eran firmes y convencidas de lo que decía, sus palabras no tenían miedo alguno. El viento resoplo solo un poco, moviendo mi cabello y mi capucha. Actuaremos de forma rápida, en cuanto estén listos nos moveremos por cierto necesito un medio de comunicación contigo. Le dije mientras me acerque a el. Hagamos que la camarilla ataque en las noches blancas y sacrifiquemos la carne de cañon para volar los túneles cargando nos sus tropas ¿que te parece?. Le comente lo que a mi mente había llegado de momento, pues me parecía algo bastante simple pero efectivo. Puede que funcione, pero yo no conozco bien la ciudad y eso me detiene bastante, a un que me vuelve un peligro para ellos. matemos demonios y consumamos a los camarilla, llamemos su atención. Lleve mi dedo indice de la mano derecha a la parte inferior de mis labios tratando de aclarar mis pensamientos, pues en ese momento quería ver muerte a los enemigos. Me deje llevar por el momento... le dije mientras le mire. ¿que opinas? tu conoces todo el rollo en la ciudad, ¿por donde comenzamos a buscar?. Le dije, con un aspecto mas serio y muerto como en un comienzo.

El Ducti miraba con alegría a la Paladín, una amplia sonrisa adornaba su rostro mientras escuchaba las palabra de Andre que demostraba la sed de sangre que sentía, algo que el mismo Xaver deseaba con todo su ser, mirar la gloria del Sabbat era su mayor objetivo, destruir a la Camarilla era lo principal, los Baalis caerían llevándose consigo a la Torre de Marfil, sacudió ligeramente la cabeza mientras observaba con detenimiento a la Paladín ~Bueno~ murmuró apartando su sonrisa mostrando una seriedad absoluta ~El enfrentamiento que tuvimos hace unas noches fue en los muelles, pero algo me hace pensar que no se encuentran ni siquiera en las cercanías, los Baali son astutos, no se mostrarán cerca de su guarida, además ellos fueron bastante obvios, como si deseaban que los descubrieramos~ quedó en silencio, meditando sobre quién podría darle información sobre aquellos Infernalistas.

Bajó la mirada, en su rostro se formó un gesto de repulsión y resignación ~Conozco a alguien que puede saber más~ de haber podido un largo suspiro hubiese salido de sus labios ~pero eso requiere de un pago para que nos diga cualquier cosa~ miró a Andre, no estaba seguro de como reaccionaría la Brujah, tal vez de forma violenta o comprensiva, ella seguía siendo un misterio para el Pander.

Le mire fijamente, mientras lleve mis manos al frente colocando las al centro de mi vientre como lo haría un monje. Bien tendremos que ver ese modo de pago. Mire a la manada. Supongo que cada quien conoce su papel en la manada debemos de organizarnos. Estoy lista para actuar en cualquier momento, no esperemos para joder les su fiestecilla. Le mire a los ojos manteniendo una mirada muerta. En cualquiera de los casos buscaremos y alcanzaremos la gloria, que la muerte no es lo que nos espera pues hace mucho que estamos muertos, la gloria es la siguiente parada, cuento contigo como mi mano derecha Xaver. Le dije mientras Incline la cabeza un poco ante el en señal de respeto por sus actos. Se que lo que decidas Mi Ducti estara bien. Dije en señal de respeto, pero a un con esa voz muerta y esa mirada helada.

El Pander miró de forma tranquila, tal vez un poco aliviado por el actuar de la Paladín, sabía que aquel contacto merecía la pena el pago, aunque éste se asimilara al de los Assamitas, si Andre hubiese decidido obtener información "de forma gratuita" lo más seguro es que fuera errónea o la última información que pudiesen conseguir,

~Agradezco sus palabras mi Señora~ colocando la mano diestra sobre su corazón muerto se inclinó levemente ante la Paladín, ~Prometo que yo y mi manada nos entregaremos hasta el último momento, contactaré cuanto antes al Adicto, sé que él conocerá algo de la ubicación de los Baali, así como de Casablanca~ una ligera sonrisa se formó en su rostro al momento que llevaba las manos a sus bolsillos ~Si nada más se le ofrece, procederé a reunir a mi manada para movernos cuanto antes~ miró a la Brujah, como siempre esperando su aprobación para cualquier movimiento.

Le mire firmemente a los ojos, sin mostrar sentimiento alguno mas que el de total seguridad, expresando una mirada que  castigaría cualquier error. En cuanto sea posible y reciba tus instrucciones actuaremos, estaré contigo en cada momento a si que será mejor que me presente con el resto de la manada y comencemos a movernos. Le dije con mi voz muerta, sería y firme. Mire a la manada y volví la mirada a el. Para el momento que tu me indiques estaré lista. Le dedique una leve reverencia en respeto al Ducti, mientras me volví mirando el cielo por encima de las copas de los arboles, dado le el derecho y libertad a retirarse. Mientras el viento tranquilo y frío del lugar comenzaba a soplar lentamente, meciendo las hojas de los arboles lenta mente.

~Estoy de acuerdo mi Señora, mi manada debe conocerla cuanto antes, sin embargo, permítame que comencemos cuanto antes a conseguir el pago por la información, si los restantes no son capaces de sobrevivir no merecen conocerla~ bajó levemente su mirada antes de dar media vuelta ~Con su permiso~ dicho esto emprendió su camino de regreso a las catacumbas dejando a la Paladín, las órdenes estaban dadas, no había necesidad de perder más el tiempo.

Off Rol:

La manada se quedó esperando en las catacumbas, Andre se encontraba únicamente con Xaver.

Mire partir al Ducti, mientras yo a paso firme me alejaba de allí a donde serían mis aposentos, ingrese a la habitación y cerré, deje mi maleta sobre la cama y mire por unos momentos la puerta. El lugar uno era una suite ni nada parecido, al contrario era un cuarto convencional, viejo y sucio pero lo funcional para mi, me despoje de mi ropa y tome un balde de agua que estaba por la mesilla de noche y me limpie la muerta piel, mientras mire el relicario que me habían entregado esa misma noche. el lugar era bastante acogedor y reservado. Sera tiempo de mejorar y aumentar mis habilidades si es que pienso pelear contra ese justicar y sobrevivir en este lugar. Llevaremos la gloria con nosotros, seremos grandes. De la maleta saque una pequeña toalla y un perfume de naranjo, que me dedique y seque la piel.

Off: estaba distraída xD , si me permites hay que colocar el detonante de ira en mi ficha para que este mejor especificado.